IA: ¿Desplazamiento laboral o nuevas oportunidades?

A pesar de las preocupaciones sobre la seguridad laboral en torno a ChatGPT, las funciones de revisión de IA surgen como nuevas oportunidades de empleo

Si bien el advenimiento de la inteligencia artificial (IA) ha despertado temores respecto de la estabilidad laboral, también está dando origen a un nuevo nicho de empleo: el escrutinio de las entradas y salidas de los modelos de IA de vanguardia.

Desde noviembre de 2022, el auge de la IA generativa (tecnología que permite a los algoritmos de IA generar textos e imágenes auténticas y de apariencia humana en respuesta a indicaciones de texto) ha generado preocupación entre los líderes empresariales, empleados y académicos de todo el mundo. El temor es que esta tecnología disruptiva pueda afectar significativamente a una amplia gama de ocupaciones profesionales.

La IA generativa es capaz de elaborar prosa refinada e incluso presentaciones corporativas que rivalizan con la calidad producida por profesionales con formación académica. En consecuencia, no sorprende que exista preocupación por el desplazamiento de puestos de trabajo debido a la IA. Morgan Stanley predice que la IA podría reemplazar hasta 300 millones de empleos, incluidos aquellos en administración de oficinas, sectores legales, arquitectura e ingeniería, ciencias biológicas, ciencias físicas y sociales, y operaciones financieras y comerciales.

Sin embargo, el lado positivo es que los datos que reciben los modelos de IA y los resultados que producen a menudo requieren guía y revisión humana. Esta necesidad está creando nuevas oportunidades profesionales y fuentes de ingresos suplementarias.

Prolific, una empresa que vincula a los desarrolladores de IA con los participantes de la investigación, ofrece una compensación por revisar el contenido generado por la IA. La empresa paga a personas para que evalúen la calidad de los resultados producidos por la IA, recomendando un pago mínimo de 12 dólares la hora, con el salario más bajo fijado en 8 dólares la hora.

Guiados por los clientes de Prolific, que incluyen Meta, Google, la Universidad de Oxford y el University College London, estos revisores humanos navegan a través del contenido potencialmente inexacto o dañino que pueden encontrar. Deben dar su consentimiento para participar en la investigación.

Un participante de la investigación entrevistado por CNBC reveló que con frecuencia tenía que intervenir para brindar retroalimentación sobre los errores del modelo de IA y sugerir correcciones o enmiendas para evitar respuestas inapropiadas. En un caso, incluso se enfrentó a un modelo de IA que intentaba persuadirlo para que comprara medicamentos.

Phelim Bradley, director ejecutivo de Prolific, señaló el surgimiento de una nueva generación de «trabajadores de IA» que desempeñan un papel crucial en la configuración de las entradas y salidas de datos para modelos de IA como ChatGPT. Mientras los gobiernos deliberan sobre la regulación de la IA, Bradley enfatizó la importancia de centrarse en temas como el trato justo y ético de los trabajadores de IA, la transparencia en la obtención de datos utilizados para construir modelos de IA y evitar que se filtren sesgos en estos sistemas debido a sus métodos de capacitación.

En julio, Prolific obtuvo 32 millones de dólares en financiación de inversores como Partech y Oxford Science Enterprises. Gigantes tecnológicos como Google, Microsoft y Meta están compitiendo por la supremacía en el floreciente campo de la IA generativa, principalmente debido a sus potenciales beneficios de productividad. Sin embargo, esto ha generado desafíos regulatorios y éticos relacionados con la transparencia de los procesos de toma de decisiones en estos modelos y la necesidad de garantizar que la IA sirva a los intereses humanos.

Hume, una empresa que utiliza IA para interpretar las emociones humanas a partir de expresiones verbales, faciales y vocales, emplea Prolific para evaluar la calidad de sus modelos de IA. Recluta personas a través de Prolific para participar en encuestas que evalúan la calidad de las respuestas generadas por IA.

Los «ingenieros rápidos» es otro rol emergente que coloca a los humanos en el centro del desarrollo de la IA. Determinan las indicaciones óptimas basadas en texto para que los modelos de IA generativa obtengan las respuestas más efectivas.

Los datos de LinkedIn revelan un aumento en los empleos que mencionan la IA. Las ofertas de trabajo que hacen referencia a la IA o la IA generativa se duplicaron a nivel mundial entre julio de 2021 y julio de 2023, según la plataforma de redes profesionales.

Las empresas también están utilizando la IA para automatizar las revisiones de la documentación reglamentaria y los trámites legales, aunque con supervisión humana, lo que pone de relieve aún más el panorama cambiante de las oportunidades de empleo dentro del dominio de la IA.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll hacia arriba